Una efeméride. Una canción. Y la historia que las conecta. Cada día. Desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre.

HELTER SKELTER
The Beatles

La actriz Sharon Tate es brutalmente asesinada (1969)

La publicación en 1968 de Helter Skelter supuso un punto de inflexión importante en la producción musical de los Beatles. Esta es uno de los temas de los Fab Four que más críticas dispares ha generado. Desde los que la encuentran unacanción extraordinaria, a los que la han destrozado con sus comentarios, esta pieza incluida en el White Album ha sido centro de análisis y debate. Especialmente desde que el verano de 1969 se vio involucrada en el trágico episodio protagonizado por la familia Manson y que terminó con el brutal asesinato de 4 personas, entre las que se encontraba la actriz Sharon Tate.

Según Paul McCartney, la inspiración para escribir el tema le vino cuando en 1967 leyó una entrevista al líder de The Who, donde Peter Townshend comentaba que la banda acababa de grabar «el disco de rock más desmadrado, estridente y divertido» que nunca hubiera registrado. McCartney afirma que nunca supo a qué trabajo se refería exactamente Townshend, pero que la frase le dio la idea de componer un tema ‘realmente bestia’ y de ahí nació Helter Skelter. Para el título tomó el nombre de un tobogán en espiral que se veía en muchos parques británicos para utilizarlo como metáfora de un viaje en caída. La traducción más precisa seguramente sería ‘descontrol’, pero las interpretaciones que se hicieron en diferentes países recogió expresiones tan sui generis como Ni crudo ni cocido en España o A troche y moche en Latinoamérica.

Charles Manson descubrió la canción cuando apenas hacía dos años que había salido de la cárcel, donde cumplía una condena de seis años por estafa. Allí había descubierto los Beatles y se había pasado muchas horas encerrado en la celda tocando sus canciones con la guitarra. Y allí fue también cuando comenzó su formación esotérica y su interés por la filosofía oriental. Cuando salió en 1967, Manson se encontró con unos Estados Unidos totalmente entregados al Verano del Amor, las drogas psicodélicas, el sexo libre y una búsqueda generalizada de respuestas en una nueva espiritualidad. Aprovechando los festivales y las concentraciones hippies, pronto se erigió como gurú en San Francisco y en pocos meses con un grupo de acólitos se fue a vivir en Spahn Ranch, un lugar en el desierto californiano que había servido menudo como escenario en el rodaje de varios westerns.

Instalados en este rancho, la Familia Manson, que así es como se hacían llamar, se sumergieron en la visión del mundo creada por su líder, el cual estaba convencido de que se acercaba una gran rebelión mundial fruto de las tensiones raciales del momento y que terminaría inevitablemente con un inminente apocalipsis. Según Manson, todo lo que le había sido revelado por alguna fuerza divina, estaba escrito en mensajes subliminales en las canciones del White Album y concretamente Helter Skelter era la pieza clave de esta teoría. Las reverberaciones y sonidos incongruentes que acompañaban la música a lo largo del tema y las frases sin lógica que formaban sus versos fueron el combustible ideal para terminar de encender su delirio. Manson interpretó que el cuarteto de Liverpool eran los jinetes del apocalipsis decididos a exterminar a todos.

Pero el Helter Skelter predecido por Manson parecía que no llegaba tan deprisa como esperaba, así que decidió tratar de acelerarlo un poco enviando a cuatro miembros de la secta a asesinar a ricos y famosos, con el objetivo de culpar a los Panteras Negras e iniciar así la guerra racial que creía que tenía que desencadenar el principio del fin. La fecha elegida fue la noche del 8 de agosto y las víctimas, las personas que esa noche estaban en la casa del 10050 de Cielo Drive, que el cineasta Roman Polanski y su esposa, la actriz Sharon Tate, tenían alquilada en Beverly Hills.

Las instrucciones de Mason fueron claras: entrar en la vivienda y destrozar de la manera más truculenta a todos los presentes. El resultado, cuatro víctimas mortales brutalmente asesinadas a patadas, tiros y cuchilladas: Sharon Tate, embarazada de ocho meses; Jey Sebring, antigua pareja de Tate y reconocido peluquero de Hollywood; el guionista polaco Voytek Frykowski; y Abigail Folger, heredera de la empresa cafetera Folgers. El director de cine, que se encontraba de viaje en Europa localizando para su próxima película, y el productor musical Quincy Jones y el actor Steve McQueen que también estaban invitados a la velada pero que finalmente no asistieron, se salvaron de la carnicería. Los cuerpos inertes y perforados de las cuatro víctimas fueron encontrados la mañana siguiente por el ama de llaves de los Polanski en un escenario desolador y en el que apareció escrito en la nevera con sangre se podía leer «Healter Skelter» (sic). A pesar del error ortográfico, a nadie se le escapó que estas dos palabras como firma del crimen hacían referencia a la canción de los Beatles.

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