GLORY DAYS

Bruce Springsteen

Se juega el primer partido oficial de béisbol (1846)

Las canciones de Bruce Springsteen suelen ser un retrato muy personal de la vida americana. Sus letras evocan historias de juventud que viajan en un entorno de coches, autopistas e imágenes industriales. En el caso de Glory Days, The Boss recurre a todos estos elementos para cantar sobre el reencuentro casual con un viejo amigo del instituto que ya en aquella época destacaba como jugador de béisbol, uno de los deportes rey de Estados Unidos.

A principios de los años sesenta, Bruce Springsteen y Joe DePugh fueron compañeros de clase en la escuela de secundaria St. Rose of Lima de Freehold, la ciudad del estado de Nueva Jersey donde ambos crecieron. Durante un par de años jugaron juntos en la liga infantil y juvenil Babe Ruth y se hicieron buenos amigos. Pero poco a poco fueron tomando caminos diferentes cuando Springsteen comenzó a interesarse por la música y abandonó el béisbol. Desde que había visto actuar Elvis Presley en el programa de televisión The Ed Sullivan Show, supo que quería entrar en este mundo. Así que con 13 años se compró su primera guitarra por 18 dólares y comenzó a dedicarle horas para aprender a hacerla sonar. Enrtetanto, DePugh seguía focalizado en el deporte, entrenando y jugando cada vez más e incluso haciendo pruebas para equipos de otras categorías. Esta diversidad de intereses hizo que con el tiempo los dos amigos se fueran distanciando y perdieran el contacto.

Pero en verano de 1973 el azar quiso que se volvieran a encontrar. DePugh estaba a punto de entrar en un bar de la población vecina de Neptuno justo cuando Springsteen se disponía a salir de él. Al cruzarse rápidamente se reconocieron y ambos decidieron aprovechar aquel reencuentro para hacer unas cervezas y recordar viejos tiempo hasta que les cerraron el local. Una década más tarde, Springsteen recuperaría ese momento y lo inmortalizaría en Glory Days, una de las canciones que incluyó en 1984 en Born in the USA. Con el lanzamiento del tema se especuló sobre el hecho que DePugh fuera el protagonista de la letra, pero no fue hasta 1997, durante el acto de celebración del trigésimo aniversario de la insituto St. Rose of Lima, que Springsteen lo confirmó. DePugh no asistió al acto y no pudo agradecerle a su amigo la dedicatoria. Pero lo pudo hacer unos años más tarde, en 2005, un día que ambos quedaron para comer y volver a revivir, una vez más, sus días de gloria.