PURPLE RAIN

Prince

Se inaugura la sala de conciertos First Avenue de Minneapolis (1970)

El 3 de abril de 1970 abría sus puertas First Avenue, una de las salas de conciertos más emblemáticas de Minneapolis. Está ubicada en un edificio art déco de 1937 que durante años acogió una estación de autobuses. Se inauguró como The Depot y en su primer cartel contó con la actuación de Joe Cocker, que realizaba su primera gira por Estados Unidos.

El verano de 1972 el local incorporó una discoteca y pasó a llamarse Uncle Sam’s. Y durante casi nueve años funcionó con esta doble oferta de sala de baile y espacio de conciertos. Pero con la llegada de los ochenta, comenzó a expandir su programación de música en vivo a géneros más vanguardistas y finalmente, en diciembre de 1981, terminó cogiendo entidad propia bajo el nombre con el que aún funciona hoy: First Avenue.

El cambio de denominación no afectó para nada la popularidad del local, que en sus primeros diez años de existencia ya se había hecho un hueco en la escena musical local. Pero lo que seguramente ayudó a acabar de coronarlo como el club referente de la ciudad fue el hecho que Prince lo eligiera como escenario del lanzamiento de Purple Rain. Fue el 3 de agosto de 1983. Prince tenía apenas 25 años, pero ya se había convertido en el músico más relevante de Minneapolis, especialmente gracias al éxito de su quinto álbum titulado 1999 y considerado por la crítica como su primera gran obra maestra.

Prince había tocado anteriormente en el First Avenue y solía explicar que era un club que le traía suerte a la hora de probar nuevas canciones. Así que decidió que éste era el lugar idóneo para estrenar su última composición. Había escrito Purple Rain como tema principal de la película del mismo nombre y que supuso su debut en el cine, una industria en la que hacía tiempo que quería entrar siguiendo la estela de Michael Jackson, que lo había hecho con The Wiz en 1978. En Purple Rain Prince interpretaba el papel de The Kid, un talentoso cantante criado en una familia disfuncional que canaliza su ira a través de la música.

La actuación en First Avenue debía servir para grabar imágenes que posteriormente se utilizarían en la película y también para el videoclip de presentación de la canción. Prince salió al escenario acompañado de su banda, The Revolution, y de su inseparable Mad Cat, una guitarra de segunda mano que había comprado por 30 dólares en una gasolinera. La sala estaba a rebentar y las 1.500 personas que llenaban el local esa noche poco imaginaban que estaban a punto de oir por primera vez uno de los himnos de la música del S.XX.