LA CHICA DE AYER
Nacha Pop
Muere el dictador argentino Jorge Rafael Videla (2013)
Escrita por Antonio Vega en 1977 en la playa de Malvarrosa mientras disfrutaba de un permiso del servicio militar que estaba haciendo en Valencia, La Chica de Ayer se publicó en 1980 en el disco de título homónimo que el compositor madrileño grabó con Nacha Pop, el grupo que formó con su primo Nacho García Vega, Carlos Villalta (Carlos Brooking) y Antonio Martín Caruana (Ñete). La canción describe la sensación de resaca permanente y de deriva existencial de un joven que recuerda una chica que conoció la noche anterior en El Penta, uno de los bares de referencia de La Movida. Vega no reveló nunca la identidad de la joven, pero recientemente se la ha podido identificar como Maite Echanojáuregui, una chica de Bilbao que entonces tenía 17 años y con quien el autor tuvo una breve relación en aquella época.
Convertido en todo un clásico, el tema ha ido sonando a lo largo de las décadas y ha formado parte de la banda sonora de diferentes generaciones del país. Pero en septiembre de 2009 se convirtió en foco de una polémica por plagio de la que el autor de La Chica de Ayer no se pudo defender, ya que murió de un cáncer de pulmón en mayo de ese mismo año. La liebre la levantó Vicente Fabuel, un coleccionista de discos y crítico musical al oir por primera vez La Caza del Bisonte una canción interpretada en 1976 por el cantautor Piero sobre un tema que había grabado un año antes el cantante italiano Gianni Morandi. Tan pronto la escuchó, identificó rápidamente parte de la melodía y de los versos del tema de Nacha Pop calificándolo de un evidente «parecido razonable«.
Conocido por su activismo y su posicionamiento en el movimiento de la canción protesta, Piero fue un cantautor bastante popular durante la década de los sesenta. Nacido en Italia pero criado en Argentina, donde se trasladó con su familia cuando apenas tenía tres años, sus temas se convirtieron en himnos de la lucha social que se sublevaba contra la violencia del Estado, la persecución política y los regímenes militares, elementos que en aquellos años dominaban la realidad del país. En 1976, con la llegada al poder de Jorge Rafael Videla en una nueva forma de dictadura aún más represiva, la presión contra su persona y su obra se agravó y muchos de sus discos fueron prohibidos e incluso quemados.